Los mexicanos estamos poco acostumbrados a tomar la actividad física como algo imprescindible en el desarrollo de nuestros pequeños. Tal vez es hora de tomar conciencia y crearles a nuestros hijos el hábito de llevar una vida físicamente activa y saludable desde pequeños.
La edad preescolar se caracteriza por que los niños se mueven entre distintas fuerzas, imitan, aprenden, buscan identificarse y diferenciarse a la vez. Es una etapa fundamental ya que se independizan y buscan autonomía. Surge el negativismo y en general es la edad de la obstinación.
Según un estudio realizado por la Universidad de Colima, la edad preescolar es una de las mejores etapas para inculcarles actividades que perduren a lo largo del tiempo, tales como:
- Ser físicamente activo.
Desde hace un tiempo, en México sabemos que gatear es un objetivo fundamental para tener un buen desarrollo. ¿Pero qué pasa con los movimientos también esenciales de los que no somos conscientes todavía? Creemos que correr, brincar, batear, lanzar son movimientos que llegarán por el simple hecho de ser niño. Qué pasa si les decimos que en otros países los niños aprenden desde pequeños estos movimientos, la forma correcta de realizarlos y que además de divertirse, aprenden y desarrollan la motricidad gruesa mediante movimientos básicos que ofrece el deporte. Posteriormente son habilidades que necesitan para crecer sanos, tener confianza en sí mismos y estar listos para la etapa escolar.